¿Hay alternativas verdaderas y gratuitas a Microsoft Office?

Personalmente soy un gran defensor del software libre y del software gratuito. En este mismo espacio hemos comentado y recomendado muchas herramientas gratuitas, tanto de software libre como propietario, y seguramente seguiremos haciéndolo porque hay software gratuito de muy buena calidad.



Sin embargo hay ciertas áreas donde el software gratuito no logra ofrecernos todo el potencial que muchas veces necesitamos. Algunos son proyectos de enorme calidad y sus desarrolladores lo ponen todo en el asador, pero por las razones que sean, no logran darnos todo lo que nos pueda dar una aplicación comercial.

Algunos podrían decir que en los programas comerciales no le aprovechamos todo su potencial y opciones…cierto…ni tampoco lo hacemos con el gratuito. El problema es que los gratuitos, sean software libre o propietario, entre sus opciones disponibles es muy habitual que no encontremos algunas de las que más usamos.


Una de esas áreas donde los programas comerciales superan y con mucho a las alternativas gratuitas es la ofimática.

Opciones gratuitas y/o libres hay muchas, algunas muy meritorias, pero seamos sinceros…es Microsoft Office el que terminamos usando aunque sea (y muchas veces ES) de forma pirata. Las razones son muchas…la primera es que la suite de Microsoft es una de las más usadas en todos los ámbitos, sea en el terreno doméstico como en el comercial y la mayoría de documentos de ofimática que terminarán en nuestros equipos han sido creados por Word, Excel, PowerPoint o Publisher…y si necesitamos usarlos lo más fielmente posible porque así lo necesitamos de verdad, usaremos el Office de Microsoft porque al final, la totalidad de esos documentos solo con la suite de Microsoft tendremos una compatibilidad del 100%.


Si vamos a usar documentos de ofimática de forma local, es decir, nosotros lo cocinamos y nosotros lo comemos, no hay el menor problema en usar aplicaciones libres o gratuitas, pero vuelvo a insistir…si creamos un documento en Word…nada asegura que se mantengan todas las características y formato original al abrirlo con LibreOffice, por ejemplo. Y no lo digo por comentarios…lo digo con conocimiento de causa por experiencia propia.


Este problema de compatibilidad es el principal problema de todas las alternativas al Office de Microsoft, porque en cuanto a opciones y rendimiento, las alternativas gratuitas cumplen sobradamente con cualquier exigencia. Y vuelvo a recalcar…no es el rendimiento y calidad de los programas open source ni de los gratuitos propietarios…sino que la inmensa mayoría de los documentos de ofimática con los que nos encontremos serán hechos con alguna de las aplicaciones del Office de Microsoft. Y créanme cuando les digo que si reciben un documento que a la hora de abrir está mal interpretado y con su formato hecho papilla y tienen apenas media hora para hacerle modificaciones y reenviarlo…tendrán muy clarito por qué la suite de Microsoft es la elección mayoritaria en el mundo mundial y que las alternativas gratuitas, con todo respeto…se pueden ir al ojete.


No me mal interpreten…les aseguro que valoro mucho el trabajo de la comunidad del software libre…pero ni modo…hay áreas en las que no han logrado aun la calidad suficiente como para ser usados en el día a día, aunque se acerquen mucho.


Y llegados a este punto, retomo la pregunta del enunciado de este artículo ¿Hay alternativas verdaderas y gratuitas a Microsoft Office?...aunque debería decir viables porque verdaderas son todas…jajajajajaja

Si vamos a hacer un uso privado de documentos…esto es, los creamos nosotros para usarlo solamente nosotros…sí hay buenas alternativas excelentes…incluso si creamos nosotros los documentos y los compartimos con otros…serán capaces de abrirlos con muchas garantías de que se respetará el formato aunque los abran con otras aplicaciones.

Pero si queremos una compatibilidad al 100% con documentos hechos con Microsoft Office…lamento decirles que la cosa se complica y puede que en algún momento tengamos problemas y terminemos usando el Office pirata de toda la vida por muy open lover que seamos.


De todas formas, les dejo una somera lista de algunas alternativas que personalmente me han agradado y con las que menos dificultades he tenido. Unas son proyectos colaborativos open source y otras son aplicaciones o suites gratuitas pero propietarias. Estas últimas suelen ser versiones free de sus hermanas mayores de pago, lo que significa que las versiones gratuitas no son completas y habrá funciones que solo encontraremos en las de pago, pero que posiblemente nos sirvan para manejarnos en cosas básicas y del día a día.


Libre Office


No solo se le considera una de las mejores alternativas open source, sino LA ALTERNATIVA open source. Es posiblemente el proyecto más desarrollado y con una comunidad realmente muy activa y en constante movimiento.

Es un OpenOffice (también un proyecto colaborativo, pero propietario en manos de Apache) con esteroides, esto es, con mejoras, algunas muy importantes. Debido al tipo de licencias (uno de Apache y el otro MPL) Libre Office puede copiar, modificar, implementar y mejorar el código fuente de Open Office, pero no así al contrario. Debido a eso, Libre Office suele estar mejor y más desarrollado que Open Office.

Dispone de una serie de aplicaciones que son las alternativas a los programas más usados de Microsoft Office.

Así, Writer, Calc e Impress son las alternativas a Word, Excel y Power Point. Base sería la alternativa a Access. También integra Math, un editor de fórmulas matemáticas (en Office de Microsoft esta función está integrada en sus programas) y Draw, un editor de gráficos vectoriales.

En su versión 7, LibreOffice mejoró considerablemente la compatibilidad con los formatos de la suite de Microsoft, aunque aún no al 100%.

Su interfaz puede cambiarse para parecerse a la suite de Microsoft o a la de OpenOffice…así la migración de esos programas a LibreOffice no será tan dramática.


SoftMaker FreeOffice


Desde 1987, la empresa alemana SoftMaker ofrece herramientas de ofimática de muy buena calidad. SoftMaker Office es una suite ofimática comercial que trata de competir con su homóloga de Microsoft. Desde el 2008 ofrece una versión gratuita llamada FreeOffice con los tres programas estrella y más usados en ofimática. TextMaker, PlanMaker y Presentationa son las alternativas a Word, Excel y PowerPoint. Como curiosidad, dispone de la opción de exportar como ePub. Aunque es un producto gratuito, SoftMaker FreeOffice es privativo, lo que quiere decir que su código fuente no es colaborativo ni está disponible al público, lo cual podría ser una pega, pero que en la realidad se convierte en una ventaja pues los softwares privativos suelen ser mucho más estables que los open source. Aunque con esta versión gratuita podremos hacer la mayoría de trabajos que podríamos hacer en Microsoft Office, hay algunas limitaciones con respecto a su versión comercial. No se puede personalizar la cinta de opciones, no se pueden crear o imprimir sobres ni etiquetas, no permite la navegación por pestañas, no dispone de soporte técnico ni dispone de diccionarios ni correctores ortográficos adicionales. Nada que nos impida realizar trabajos comunes.


ONLYOFFICE


Proyecto desarrollado por la empresa Ascensio System SIA con sede en Letonia. Dispone de los tres módulos principales de toda suite de ofimática: Documento (Word), Libro de Excel y Presentación (PowerPoint).

Inicialmente solo estaba disponible como aplicación ofimática online donde tiene disponible todo su potencial, pero ahora mismo ya está disponible una versión para trabajar offline. Diseñado originalmente para ofrecer servicios online de ofimática a empresas. Es un proyecto propietario, no un proyecto open source.

Su interfaz se aleja un poco de la habitual cinta de opciones de la propuesta de Microsoft, aunque es sobradamente intuitiva y no tendremos problemas a la hora de migrar a esta alternativa.

Su navegación a través de pestañas es una comodidad…podemos tener varios documentos abiertos a la vez  (un documento de texto, una tabla de excel y una presentación, por ejemplo) y cambiar entre ellos muy cómodamente.


GOOGLE DOCS


Servicio totalmente online (solo necesitamos entrar con nuestra cuenta de Google). Esa es una de sus desventajas, que necesitamos estar conectados a internet y de ser posible con buen ancho de banda. Dispone de versiones gratuita y comercial para empresas y entornos académicos, donde la diferencia entre ambas es el tamaño de almacenamiento y herramientas adicionales profesionales. Pero para un uso personal y doméstico, esta alternativa es más que suficiente. Totalmente compatible con los formatos de Microsoft Office. Los documentos se guardan de forma automática en nuestra cuenta de Google Drive, con lo que estarán disponibles desde cualquier dispositivo a través de internet, aunque podemos descargar una copia a nuestro equipo para continuar trabajando los documentos offline con cualquier otro editor. Su interfaz es la tradicional a base de menús desplegables, pero muy intuitiva, así que la curva de aprendizaje será muy corta. Como nota curiosa, decir que para nutrir el contenido de nuestra APP del CA usamos Google Docs.



Microsoft Office 365 Free Web


Office 365 es la plataforma de su suite de ofimática en versión online. Aunque hay pocos que lo sepan, Microsoft dispone de una versión gratuita de Office online con todas las funciones, solo necesitamos entrar con nuestra cuenta de Microsoft. La diferencia con respecto a la versión comercial es la cantidad de herramientas auxiliares disponibles…aunque no las echaremos en falta porque son más bien para entornos académicos y empresariales. Además, el almacenamiento en la nube pasa de los 5 GB de la versión gratuita a 1 TB en la comercial. Su gran pero es que funciona exclusivamente en la nube, lo que significa que necesitaremos una conexión permanente a internet, pero si queremos una compatibilidad total al 100% con los documentos de Office…esta es la mejor alternativa. También tenemos la ventaja de que al guardarse los documentos en OneDrive, estarán disponibles desde cualquier dispositivo con una conexión a internet, aunque podemos descargar una copia en nuestro equipo para trabajarla después offline.


Hay muchas más propuestas…unas gratuitas, unas open source, otras propietarias y algunas cuantas comerciales, unas online y otras offline y algunas son incluso una mezcla, pero estas cinco alternativas son las que mejores resultados me han dado a mí y por eso las comento. Con cualquiera de ellas podremos crear todo tipo de documentos de oficina con garantías y calidad, pero vuelvo a repetir que al final termino siempre regresando al Microsoft Office de escritorio, clásico y de toda la vida que muy pocas veces ha defraudado a nadie.


No tomen este artículo como una biblia o una verdad científica…tan solo un repaso a mi experiencia con los programas de ofimática.

Dicho lo cual me retiro discretamente a mi baticueva a comer caramelos y alimentos poco nutritivos pero ricos de cojones.

Sean felices como perdices

«Los hombres tienden a creer aquello que les conviene.» Julio César

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