Guardar y Restaurar nuestro perfil de usuario del navegador Vivaldi

Los navegadores de Internet, como cualquier pieza de software, es propenso a dañarse de forma inesperada. Cuando esto sucede, no es que nos quedemos sin poder navegar porque hay muchos otros navegadores…pero nos quedamos cojos. A lo largo del tiempo, muchos personalizamos nuestro navegador de preferencia a nuestro gusto. Aparte de llenarlo de marcadores, extensiones, contraseñas, etc…


Quedarnos de repente sin esa configuración es una molestia y a veces incluso un problema.

En muchos navegadores podemos crearnos una cuenta y tener así un perfil de usuario personal, el cual suele sincronizarse en la nube. Esto permite abrir el navegador en diferentes dispositivos con nuestro perfil y tener los mismos ajustes y elementos de navegación en todos ellos. O que varias personas puedan usar el mismo navegador, pero con ajustes específicos para cada usuario cargando su perfil específico.

 

En caso de problemas catastróficos con nuestro navegador, podemos desinstalarlo y reinstalarlo en limpio para solucionar el problema y cargar nuestro perfil almacenado en la nube. Funciona, pero a veces puede que no haya conexión a internet, que el servicio de sincronización no funcione en ese momento…y a veces ese proceso lleva un tiempo valioso.

 

Vivaldi, al igual que otros navegadores de internet, puede, como hemos comentado, crear una copia de seguridad de nuestro perfil en la nube, pero no tiene una opción para hacer esta copia de seguridad de forma local.

 

 

Todos los navegadores basados en Chromium usan una estructura similar, así que lo que comentaremos acerca de Vivaldi en este artículo, es usable para cualquier otro (EDGE, Chrome, Brave, DuckDukGo, etc…).

 

Veremos ahora como hacer manualmente una copia de seguridad de nuestro perfil (historial, marcadores, extensiones, configuración, etc…) de forma local para poder usarla en un futuro si lo necesitamos y sin tener que depender de Internet. Podemos, por ejemplo, almacenar esa copia en una unidad USB y usarla para instalarla en otro equipo. Los usos depende de ustedes.

 

El primer paso es encontrar la carpeta local donde se ubica nuestro perfil.

Abrimos nuestro Vivaldi y en la barra de direcciones escribimos

 

vivaldi:about

 

Entre los datos que nos ofrece, encontramos la ruta hasta la carpeta con nuestro perfil de usuario

 

 

Copiamos esa ruta y usamos el Explorador de Windows para navegar hasta ella

Veremos que dentro de esa carpeta hay un montón de subcarpetas y archivos…todo eso son los datos de nuestro perfil.

 

 

Copiamos toda la carpeta Default y la pegamos en otra ubicación…por ejemplo, una unidad externa u otro disco duro, en Documentos…

 

 

Ahora navegamos hasta la carpeta anterior, a la carpeta User Data.

Ahí buscamos y copiamos el archivo First Run

Y lo pegamos junto con la carpeta Default que copiamos antes

 

 

Si no restauramos este archivo cuando reinstalemos una copia limpia de Vivaldi, el navegador considerará que estamos haciendo una instalación nueva y nos llevará al asistente de primer inicio.

 

 

Si por alguna razón necesitamos reinstalar Vivaldi y recuperar nuestro perfil y no podemos recuperarlo mediante la opción de sincronización en la nube (por ejemplo porque nos olvidamos de la clave de desencriptado), cerramos el navegador y eliminaremos la carpeta Default que se crea durante la instalación de Vivaldi y la sustituimos por nuestra copia de seguridad. Igualmente sustituiremos el archivo First Run en la carpeta User Data con el archivo que guardamos en los pasos anteriores.

 

Lo más cómodo es sin duda restaurar nuestro perfil con la opción de sincronización de nuestra cuenta de Vivaldi…pero si por alguna razón eso no es posible, siempre podemos usar este sistema manual como método alternativo.

Recomiendo hacer una copia de seguridad cada cierto tiempo para que la copia esté lo más actualizada posible, en especial si somos amigos de añadir y modificar datos del navegador.

 

Espero haber sido de ayuda y nos vemos en otra ocasión.

Un saludo cordial y sean felices como perdices.


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